Uno de los grandes miedos de quienes deciden someterse a un trasplante de pelo es que este salga mal.
Por suerte, como consecuencia directa de la irrupción de los nuevos métodos de injerto, la tasa de éxito de las principales clínicas especializadas en las últimas técnicas, supera ampliamente el 95%.
Sin embargo, eso no impide que, o bien como consecuencia de factores externos que afectan a la zona tratada, o bien por culpa de no seguir a rajatabla las instrucciones de cuidados posteriores a la intervención, pueda aparecer un injerto capilar infectado.
Un problema que va a centrar nuestra atención a lo largo de las próximas líneas en las que vamos a hablar de las señales que alertan de una infección postinjerto, cómo evitarlo y cómo actuar en el caso de que se produzca.
¿Cómo saber si tienes un injerto capilar infectado?
La aparición de molestias durante los primeros días, como puedan ser la tirantez, el enrojecimiento leve o un poco de picor, es completamente normal. Dicho esto, hay una serie de síntomas que es importante vigilar:
- Inflamación exagerada o que se extiende más de lo habitual.
- Dolor persistente o que empeora con el paso de los días.
- Supuración de pus o líquidos con mal olor.
- Fiebre.
- Zonas calientes al tacto en el cuero cabelludo.
Ante cualquiera de estos signos, lo más sensato es contactar con el equipo médico que realizó el trasplante de cabello, ya que la detección precoz de una infección es fundamental para evitar que vaya a mayores.
¿Por qué se puede infectar un injerto capilar?
Las causas de la infección del injerto capilar suelen estar relacionadas con factores externos como los siguientes:
- Manipular la zona con las manos sucias.
- Usar gorras, cascos o almohadas sin lavar.
- No seguir el protocolo de higiene indicado por el cirujano.
- Rascado excesivo durante la cicatrización.
- Exceso de humedad o sudor sin limpiar adecuadamente.
Aunque parezca mentira, gestos tan pequeños como estos pueden desencadenar un efecto adverso si el proceso de curación se encuentra en pleno desarrollo. De ahí la importancia de seguir paso a paso las recomendaciones postoperatorias.
¿Qué hacer si aparece una infección tras el trasplante?
La respuesta no puede ser en ningún caso automedicarse. El consumo de antibóticos y antiinflamatorios tras un injerto capilar debe prescribirse tras una revisión médica.
En el caso concreto de Cosmedica, si hay sospechas de un injerto capilar infectado, el equipo de Dr. Levent Acar se encarga de valorar el caso y proponer el tratamiento adecuado según el nivel de afectación. Dependiendo de la situación, se puede recomendar:
- Aplicación de cremas antibacterianas tópicas.
- Tratamiento oral con antibióticos.
- Limpiezas localizadas en clínica.
- Supervisión estrecha del avance del proceso.
Cuanto antes se actúe, más fácil será evitar que la infección dañe los folículos capilares implantados.
Cómo evitar que se infecte un injerto capilar
La prevención empieza incluso antes de entrar al quirófano. Elegir una clínica especializada y con experiencia reduce el riesgo de infecciones postoperatorias.
En centros como Cosmedica, clínica líder en trasplante capilar en Turquía, cada trasplante de cabello se planifica al detalle, utilizando herramientas y técnicas que minimizan el riesgo de complicaciones.
La técnica Micro Sapphire DHI, por ejemplo, emplea un bisturí con hoja de zafiro que provoca incisiones mucho más precisas y menos agresivas para el cuero cabelludo.
Otros consejos para reducir riesgos:
- Dormir con la cabeza elevada durante los primeros días.
- Evitar el deporte, el alcohol y el tabaco durante la primera semana.
- No rascar ni frotar la zona implantada.
- Usar agua tibia y champú neutro para el lavado.
- Seguir todas las indicaciones de lavado, secado y aplicación de productos.
¿El injerto infectado afecta a los resultados finales?
Lamentablemente, sí. Una infección puede perjudicar el crecimiento de los folículos injertados e incluso provocar su caída definitiva, como le ocurrió al tenista Rafa Nadal. Además, puede dejar cicatrices o zonas de menor densidad capilar.
Por eso, aunque la mayoría de trasplantes capilares evolucionan sin problemas, es vital no bajar la guardia en ningún momento del proceso.
¿Cuándo contactar con la clínica?
No hay que esperar a que aparezca fiebre o pus. Ante cualquier señal que parezca fuera de lo normal, lo mejor es ponerse en contacto con la clínica que te ha realizado el trasplante de pelo.
En Cosmedica, el seguimiento del paciente no termina el día de la intervención. Se mantiene una comunicación constante durante las semanas siguientes para asegurar que todo va bien.
Si ya has pasado por un trasplante y quieres ver resultados reales, puedes visitar nuestra página de antes y después de trasplante capilar. Y si estás valorando realizarte uno, puedes consultar el precio trasplante capilar Turquía.
Recuerda que cuidar el cuero cabelludo y seguir bien las pautas puede marcar la diferencia entre postoperatorio perfecto y uno en el que aparecen problemas como la infección del injerto; una afección no común, pero que si ocurre debe tratarse a tiempo.